El dia que hice la compra para el primer puré de Bosco tuve unos sentimientos de lo mas encontrados. Por un lado estaba feliz... mi niño ya era mayor! Con cariño seleccione las verduras con mejor aspecto y para variar exagere con la cantidad que compre. Hablo de sentimientos encontrados, porque a pesar de la ilusión que me hacia el hecho de que Bosco empezase a comer como los grandes, esto significaba que ya no iba a depender solo de mi. Hasta entonces era una sensación impresionante, casi increíble pero muy gratificante... todo lo que había crecido y se había desarrollado era por mi súper producción de leche y ahora pasábamos a una nueva etapa de su vida y de la mía.Esto sucedió a los 6 meses.... no penséis que directamente me despidieron de mi trabajo como productora de leche, nada que ver! Solo incorporamos el puré en una de sus tomas, concretamente en la de las 4p.m. Además, después de comer su puré le ofrecía pecho de postre, así que seguía sintiéndome como trabajadora de tiempo completo.
Mi pediatra me recomendo empezar con verduras y a los tres días incorporar en el puré una pechuga de pollo. Siempre le daba el mismo puré, llevaba: patata, zanahoria, calabacín, calabaza y puerro o cebolla. Cuando incorpore el pollo, primero cocinaba las verduras hirviéndolas con dos alitas de pollo para dar sabor. No se utiliza, ni sal, ni pimienta. Empece haciendo la pechuga de pollo separada y a la plancha y mas tarde decidí hervirla con el resto de las verduras. Las verduras siempre se pelan de antemano. Luego con la miniprimer lo hacia puré y para terminar lo pasaba por el chino o colador. La proporción con la que me guiaba al principio era hacer un puré de 200 gramos de los cuales 80 gramos fuesen del pollo.
Volviendo a ese momento de cambio para Bosco, esa primera cucharada de puré, ese bocado que dejaba atrás su vida de lechal... era tal la emoción, la mía en cualquier caso, que le senté en la silla que había comprado en Ikea días antes. Me produjo muchas emociones y sobretodo alegría verlo sentado en esa silla que apenas comprendía. Os digo esto porque, en varios libros que he leído, dicen que no es bueno sentar a los bebes hasta que ellos mismos se sienten por si solos, pero ese día hice trampa. Lo curioso es que mi madre y mi hermana se me tiraron al cuello en cuanto mande la foto a decirme que no debía sentarlo en la silla. Fue una trampa pequeña de un ratito pero la verdad que el razonamiento tiene todo el sentido del mundo. Si el bebe no se puede sentar solo, no es bueno sentarlo ya que su columna vertebral no esta lista para el peso que debe aguantar. Por esta misma razón nunca le senté, ni apoyado en cojines ni en el sofá ni cuando lo sujetaba... de hecho acaba de empezar a sentarse esta ultima semana y ahora tiene 9 meses. Lo bueno es que tengo fotos de ese día y fotos actuales para que veáis la diferencia de su tamaño. En la foto que sale mas mayor, mi gordo, esta recién despertado y sorprendido por la cámara.
Todos los bebes son diferentes, algunos empiezan arrastrándose por el suelo, otros sentándose, algunos directamente gatean y hay otros que no gatean nunca y pasan directamente a andar. No hay que pensar en ello demasiado, la teoría; ellos mismos harán los cambios según lo vean oportuno.
En mi próximo Blog os contare sobre como fuimos incorporando nuevos alimentos a la dieta de Bosco. También hablare de como fui variando los purés y que decidí darle con cuchara, en vaso o biberón. Desde el primer puré cambia todo, empiezas con una nueva rutina en la que hay que tener lista la comida del bebe, hasta los días que vas de viaje, tienes que planear de ante mano que le vas a dar y como lo llevaras. Os contare los trucos que he ido encontrando y los gadjets que me han hecho la vida más fácil, tanto viajando como los días que simplemente iba a estar fuera de casa a la hora de su comida.
